‘THE GRIFTERS’ INTERVIEW

¿Qué es The Grifters? ¿Un crew? ¿una página web? ¿un proyecto? ¿Boris from Bulgaria? Es difícil de determinar… pero lo que si podemos afirmar es que, The Grifters, es el fenómeno más importante que ha generado el graffiti en la era de las redes sociales.

The Grifters muestran, llevado al extremo, la cotidianidad de la vida del escritor de graffiti. En sus vídeos, protagonizados por el divertidísimo Boris From Bulgaria, se exprimen los clichés del del mundo del graffiti con un afinado e irónico sentido del humor. El objetivo: Fama. Estamos hablando de getting up en su versión 3.0.

Han publicado lo que parece una auto-entrevista abordando los temas que giran alrededor de su universo. Interesante es poco…

«The Grifters (…) es lo mejor que ha sucedido en el graffiti de internet: un photoblog original que muestra el lifestyle de los escritores de graffiti alrededor de nuestro círculo social. El objetivo está en lo que hacemos antes y después de que el producto final – la piez de graffiti –  sea creado.»

«Llegar a ser famoso en los círculos del graffiti es uno de los esfuerzos más inútiles en los que puedes malgastar tu vida. No te ayuda a ser rico, no favorece a tu salud ni hace que ligues – de hecho, al contrario. Pero si no puedes atraer a una mujer bonita en tu vida, eres, por definición, estéril. En lugar de eso, al cabo del tiempo te encuentras en los treinta siendo admirado por un montón de adolescentes como único beneficio de tu vida malgastada. Así que… ¿de qué va esto?»

«Anécdoticamente, un amigo de un país del sur demostró recientemente esto… mientras se cubría la cara en una cochera completamente bombardeada y sin cámaras. Mientras uno de nosotros le estaba haciendo un retrato, se giró y dijo «No os preocupéis, no es necesario cubrirse la cara, yo sólo lo hago por estilo!» Touché.»

«No somos extranjeros porque tenemos la habilidad de adaptarnos rápido e infiltrarnos donde quiera que vayamos. Da igual si es en un bar clandestino, en un restaurante de cinco estrellas, en una cochera de trenes, un club de strip-tease, una fiesta de piscina o un Starbucks, intentamos controlar la vida desde todos los ángulos. Intentamos ser los misteriosos y sonrientes caballeros que están cerca de ti en la mesa, o quizás nos encontrarás en unos disturbios tirando cócteles molotov – nunca se sabe. Sin embargo, en la vida de la gran ciudad esto resulta mucho más fácil, sobretodo en crisoles como Paris o Nueva York, donde las nacionalidades, culturas, estilos de vida y lenguas se mezclan y puedes encontrar un camino fácil para elegir lo que quieres y como quieres.»

«Muchos tíos nunca intentarían algo por si mismos, por lo que llaman a los locales y les piden que les lleven. Puede que ni siquiera hayan hecho un metro en su propia ciudad, pero lo hacen para obtener una percepción de validez social e impulsar el ego aparentemente. Nosotros siempre hemos creído que este carácter nunca lleva a nada bueno. Estos tíos no saben por qué hacen lo que hacen. Para ellos – ‘NO, METRO, NO POSSIB’.

En la otra cara están aquellos que se dedican estrictamente a pintar el metro y tener mucha experiencia en ello. No paran de viajar y explorar lo nuevo, sitios sucios, países y horizontes con, aparentemente, la única idea – conseguir sistemas. De todas formas, algunos de los tíos más dedicados que hemos conocido a lo largo de los años destacan por su desea o de absorber el sabor y la fiesta autóctona, en el momento adecuado. La diferencia con los primeros es la motivación y el propósito. Para ellos – «YES, METRO, POSSIB». «

«Nosotros teníamos novias en ese momento, pero las chicas nunca estaban ahí – ellas estaban guardando la casa y mordiéndose las uñas, mientras nosotros habíamos cambiado besos y abrazos por una gama específica de colores sobre una chapa que elegimos como objetivo. Era como un episodio de «Donde las chicas no están», y elegimos deliberadamente el «campo de nabos». Un poco gay, no?»

«No nos gustan las etiquetas. Pero si eres el más inteligente de la habitación, entonces estás en la habitación equivocada.»