EL MAC, PIECES OF REALITY

«La ocasión la pintan calva» que se dice. ¿El Mac en Tudela de Navarra en el Avant-Garde y después en Barcelona? ¿Qué le trae por aquí? Pintar uno de sus retratos gigantes en una de las paredes de la fábrica Montana, entre otras cosas.

Aprovechamos ese momento para acercarnos, entrevistar al artista y en cambio la  fortuna nos sonrió y nos encontramos con El Mac, la persona.

Este escritor que prefiere pintar de noche – motivo por el cual le dieron las uvas y acabó durmiendo en un rincón de la fábrica Montana, sobre unos cartones durante el primer de día de trabajo – nos demostró que más allá de las etiquetas es alguien comprometido con lo que hace, que intenta alcanzar el ideal de belleza y humanidad con cada una de sus piezas.

Aquí os dejamos con unos pedazos de su realidad…

¿Cómo llegaste al graffiti?

Mi madre es artista y desde pequeño dibujaba. Empecé a pintar graffiti en el 94 más o menos. Cuando lo hice no tenía claro si iba a ser una cosa pasajera o iba a durar toda la vida. Para mí, no hay mucha diferencia entre el muralismo y los graffitis. La hay claro, pero comparten la misma raíz.

Empecé a pintar en la calle gracias a unos compañeros de clase; verles salir a hacer tags y el libro «Subway Art» fueron los detonantes.

¿Cuál es el primer eslabón de tu cadena creativa?

Siempre escucho música cuando pinto, jazz, música de los sesenta, setenta, con ritmo.

¿En qué te fijas cuando vas por la calle?

Depende de la ciudad, pero por ejemplo en ciudades como Barcelona me fijo en los edificios, el graffiti, las caras de la gente. En Amsterdam, que es una ciudad también con mucha cultura, aunque me parece interesante la zona de las putas, una vez la has visto, me gusta mirar los edificios, las gárgolas…

¿Tienes un plan?

¿Algo como un plan a cinco años? jajaja

Bueno, si me refiero si sigues una dirección desde que empezaste…

Bueno, la vida está llena de imprevistos, pero desde siempre supe que quería dedicarme al arte, de alguna manera, ya sea con graffiti, murales, cuadros, pero prefiero pintar para la gente, para que lo vean. Eso siempre formará parte de mi vida.

Me siento un poco responsable, aunque suene sobrevalorado, pero me gusta la idea de poner todo lo que tengo en lo que pinto. Intento hacer, una especie de labor social, algo  que ayude o inspire a la gente. Me siento de alguna forma obligado. No sólo para que lo vean escritores de graffiti o muralistas, sino todos.

Hay mucho arte bueno en la calle, y yo siento que tengo que poner todo mi empeño, incluso aunque no sea muy sano para mí.

Para mí, pintar es murales es esencial pues aunque no duren mucho, me da la sensación de que en la calle, su vida es más plena. Su luz brilla más intensamente.

Tu punto débil/ tu punto fuerte. Tu reto.

Tengo problemas para mantener el tiempo entre trabajo y vida. Cuando trabajo pintando dejo de lado el resto, me enfoco totalmente en lo que hago. Pienso que pinto muy lento, y me gustaría ser más rápido y aprovechar mejor mi tiempo.

Cuando uno empieza a pintar tiene una inocencia o una frescura que con el tiempo se transforma en técnica. ¿Cómo ha sido tu transformación?

En el pasado cuando estaba empezando no pensaba demasiado en conceptos, ni ideas, porque amo pintar, y me sentía que estaba aprendiendo por mi cuenta, el cuerpo, las sombras etc. Pero últimamente he estado trabajando en la parte abstracta de mis pinturas, ponerle más alma a lo que hago.

¿Es eso lo que quieres transmitir? Tus pinturas son, en general, suave, muy humanas y si hay crítica es suave como la seda…

He pintado cosas más feas, negativas y oscuras, es parte de la sensibilidad, pero para mí es  como parte de la responsabilidad hacia la gente demostrar lo más positivo, lo que eleve el espíritu para inspirarles.

Me gusta lo oscuro, por ejemplo  el arte de Goya, es realismo duro. Yo  a veces hago cosas así, pero soy idealista y me gusta hacer cosas que señalen la  perfección.

¿Cómo has llegado a desarrollar tu técnica?

Al principio mi técnica era como la del  aerógrafo, más suave, más fina pero tras años de pintar en la oscuridad sin ver lo que hacía eso cambió, y después veía en las fotos los trazos a fatcap de los retratos de amigos y desconocidos, de cientos de campesinos mejicanos en trenes. Años más tarde vi que pintar de noche me había obligado a pintar con más libertad, más suelto y decidí probar eso a propósito en las piezas hechas de día. Eso sería hacia el 2002 o 2003.

Es una forma muy difícil de pintar, pero me gusta.

¿Eres muy crítico contigo mismo?

Mucho, soy el peor conmigo mismo.

¿A qué  artistas admiras?

Pues he visto cosas nuevas hechas por ejemplo Aryz u Os Gemeos, y muchos escritores de graffiti que hacen trabajos muy buenos.

Aunque mi mayor inspiración viene de artistas más antiguos. Los muralistas mejicanos como Ribera, y Siqueiros. Jorge González Camarena es uno de mi muralistas favoritos. Cuando ellos empezaron estaban haciendo una versión temprana de lo que hacemos ahora. Arte que no era necesariamente ni para ricos ni con fines religiosos. Estaban haciendo con su trabajo una gran labor social.

A parte de los muralistas, me gustan grandes maestros como Caravaggio, Miguel Angel, Vermeer, podría seguir y seguir…

¿Qué piensas de la polémica sobre pintar en espacio público, el respeto o no?

El espacio público es espacio público. Tengo problemas con la gente que firma sobre las iglesias, monumentos, casas de gente, pero vivimos en ciudades, así que en definitiva si pintas en el espacio público, en mi opinión creo que hay que hacerlo lo mejor posible, aunque te arriesgues, no sólo por el respeto a los demás sino por el respeto a ti mismo. Si firmas, haz un buen tag. Practica tu escritura, te representa y está claro que nadie nace sabiendo.

Después hay otro tema, en ciudades como Barcelona o Los Angeles, estas están intentando acabar con todo esto. Tienes que pedir permiso para pintar en cualquier lado, incluso si es un trabajo en propiedad privada. Así que se han perdido los murales y ahora sólo queda el bombardeo, y no tengo problema con eso, me gusta, en serio, pero me da pena que se pierda todo lo demás.

¿Qué te quita el sueño?

Buena pregunta. Bueno, normalmente trabajo mucho como para tener ese problema, quizá por eso trabajo mucho.

¿Qué te hace sentir como que puedes con todo?

En general me siento así tras hacer algo bueno, una pieza de arte, algo bueno por mis amigos (quizá debería hacerlo más), cuando la gente se me acerca y me dice que le gusta lo que hago.

¿Qué te gusta más: pintar grande o pequeño?

Prefiero pintar grande, lo más grande posible.

¿Qué le pides a un bote?

Que cubra bien, que sea opaco. Por mi técnica uso fatcap porque necesito que haga un círculo perfecto pero vacío.

¿Futuros proyectos?

Tengo muchas cosas por hacer. Me siento afortunado por las oportunidades que tengo, por hacer lo que hago, poder viajar. Pronto viajaré a Méjico, donde tengo muchas ganas de pintar, conocer la cultura, la gente. Tengo unos posibles proyectos aquí en Barcelona, con una una galería el próximo año. También un show en Los Angeles también  el año próximo.

* Agradecimientos a Musa por la entrevista, al equipo de Montana Colors y Jorge Gerada (Avant-Garde) por hacerlo realidad, a Mar Roig por las fotos y, como no, a El Mac por habernos obsequiado con este fantástico regalo. Pronto, un video con el proceso.