Muchas horas invertidas en una pieza que puede durar un suspiro. Esa es la idea del concepto «burner» que el demencial de Lush intenta transmitir con su último vídeo. Como no, aprovechando para caricaturizar algunos roles típicos de los escritores de graffiti, concluye el mensaje de la obra con la definición literal de burner. Como siempre gracioso, odioso y esta vez peligroso.
*Por supuesto que a nadie se le ocurra imitar esta acción tan negligente.
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