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En Australia y, para denunciar la falta de cobertura en medios y el poco cuidado que pone el gobierno australiano en cortar la crisis climática, 41
artistas, creativos y voluntarios han creado una iniciativa llamada Bushfire Brandalism.

“Los peligros del cambio climático no son ya profecías distópicas sobre el futuro.”
Ésa y otras frases similares, son las que nos vienen a la cabeza cuando leemos, vemos o padecemos directamente los efectos de la crisis climática a la que se enfrenta la humanidad en todo el planeta. En cada parte del globo la gente lidia con situaciones que rayan la catástrofe como consecuencia de las políticas conservadoras y unos hábitos de consumo que atacan los ecosistemas mermándolos o destruyéndolos.

En el caso de Australia, (recordemos que fue uno de los países que se retiró de los Acuerdos de París, junto a USA, Rusia, Brasil y Turquía) sufriendo los terribles efectos de unos incendios que hasta el momento han devastado 52.400 kilómetros cuadrados, donde han muerto 27 personas y hay miles de desplazados. Donde hay más de 1.000 millones de animales afectados y se han emitido 400 magatoneladas de CO2 a la atmósfera. Estos son solo algunos de los desesperanzadores datos de la catástrofe que está arrasando el continente austral que está en manos del lobbie del carbón, de su primer ministro liberal, Scott Morrison y el magnate mediático Rupert Murdoch, negacionista y dueño de New Corps (The Wall Street Journal, The Times, The Sun).

Bajo este clima, nos viene a la cabeza la frase: “cuando la ley es injusta, la ilegalidad es un deber”, tras ver la inicitiva de 41 artistas, que han salido a las calles en 3 ciudades australianas para realizar la mayor campaña de arte no autorizada de la nación con el nombre de #BushfireBrandalism. Sydney, Melbourne y Brisbane se convirtieron la semana pasada en el escenario de la exposición de arte al aire libre más grande del país. Los diseños originales se centran en una variedad de temas, que van desde la crítica a la industria de los combustibles fósiles, la valentía de los bomberos locales y la destrucción de la flora y fauna únicas del país. Estos posters han sido instalados en las paradas de autobuses locales y espacios publicitarios similares y promueven a través del código QR al acceso directo a información relevante y a más de 30 organizaciones benéficas que luchan contra el problema.
A través de los seguidores en las redes sociales, estos artistas esperan crear conciencia sobre las causas subyacentes de esta temporada anormal de incendios y las acciones necesarias para prevenirla y controlarla en el futuro.

En el comunicado de prensa, estos artistas se expresan de esta manera:
“Como grupo colectivo de artistas australianos, nos hemos visto obligados a reclamar espacios publicitarios públicos con carteles que hablan de la inacción del gobierno australiano sobre el cambio climático y los devastadores incendios forestales.
No aceptamos que esta situación sea «negocios como siempre». Estamos haciendo visibles estos problemas en nuestros espacios públicos y en nuestros medios de comunicación; áreas monopolizadas por entidades que mantienen agendas conservadoras de negación climática. ¡Si los periódicos no imprimen la historia, lo haremos nosotros! «- Brandalism Bushfire

Más allá de los incendios forestales, la intervención habla más ampliamente del uso del espacio publicitario convencional en Australia. Con una entidad, la arriba mencionada New Corps, que controla el 59% de todas las ventas diarias de periódicos, los artistas cuestionan la posición del panorama de los medios en Australia y su cobertura de los temas relacionados con el cambio climático.